Tras un primer tiempo realmente espantoso sin oportunidades claras de gol, con un Atlanta que salió a especular con un contragolpe que nunca llegó y un rival que nunca supo qué hacer con la pelota y el terreno que cedían los dirigidos por García, ambos equipos sabían que tenían mucho que mejorar en el complemento.
Independientemente de la necesidad de sumar puntos la imagen brindada era realmente muy pobre para dos equipos que tienen por historia la necesidad de como mínimo clasificar al reducido.
En la segunda mitad, Atlanta salió a dar un poco más de pelea en el medio campo y el partido se hizo un poco más abierto.
A los 28 minutos Atlanta generó la jugada colectiva más importante de los últimos 3 partidos y tras un centro de Rojas, Alejo Dramisino logró abrir el marcador con un cabezazo qué logró vencer la resistencia de Rago.
Con el resultado a favor el bohemio volvió a perder el medio campo y Temperley sin muchas ideas comenzó a adelantarse en el terreno de juego.
A los 33 minutos un centro desde lejos que no pudo controlar el uno bohemio terminó con la pelota en los pies de Arturia que remató con el arco vacío para poner la igualdad en el resultado.
Con el encuentro igualado en uno el equipo parecía estar descontrolado desde lo emocional, muestra de ello fue que Maxi González ingresó a sumar juego y recuperar la zona media del campo pero sólo jugó 9 minutos y fue expulsado por doble amarilla.
Si bien era necesario ganar para acortar distancias con los de arriba, Atlanta se trajo un punto del sur que tendrá mucho valor si el próximo lunes cuando se reciba a Brown en el León Kolbowski el bohemio vuelve a sumar de a tres contra el equipo que si hoy terminará el torneo estaría descendiendo a la B Metro.