Y fue inmerecido porque Atlanta dominó gran parte del encuentro y si bien no género tantas jugadas de peligro en la primera mitad, logró imponer sus intenciones de jugar por las bandas fallando en el centro y remate final.Y
Atlanta lo dominó incluso cuando quedó con 10 jugadores por la injusta expulsión de Dramisino a los 37 minutos del primer tiempo.
El segundo tiempo Atlanta siguió materializando el juego pero encontró más opciones por el carril del centro aunque continuaba fallando en la definición.
El gol del bohemio llegó a través de Rueda. El ex Almagro conectó de cabeza un buen centro de Rios.
El empate llego en el minuto 46 cuando tras un tiro de esquina pasado al segundo palo un jugador de Gimnasia aguanto la pelota con la mano y tiro un centro de taco ante la pasividad de la defensa de Atlanta, para Ibáñez convierta.
Más allá de virtudes o defectos en el juego desplegado por el bohemio bajo una lluvia torrencial y un campo de juego que soportó en perfecto estado todo el encuentro, los errores de la cuaterna arbitral fueron determinantes en el resultado.
Primero por la expulsión de Dramisino quien no debió ser expulsado si el árbitro media con la misma severidad todas las faltas. Dramisino fue amonestado mientras que los jugadores del conjunto salteño fueron advertidos.
Segundo por el gol no cobrado a tras un cabezo de Ríos que dio en el parlante de adentro del arco y el árbitro y el asistente no vieron.
Y para completar el bochorno que fue el arbitraje en la jugada del gol de Gimnasia y Tiro, el jugador que tira el centro frena la pelota con la mano.
Ahora queda dar vuelta la página para llegar de la mejor manera al duelo en Mendoza frente a Gimnasia. El encuentro fue programado para el día lunes a las 14:45.