TODO CONCLUYE... ¡AL FIN!

Llegó el final del torneo y como no podía ser de otro modo, Atlanta perdió en su visita a Adrogué por 2 a 1. 

Con este resultado, el bohemio dirigido en forma interina por Nicolás Barrero, llegó a las 10 fechas sin conseguir una victoria sumando solo 3 puntos sobre 30 posibles.

Si bien desde lo futbolístico, los de Villa Crespo dejaron una imagen distinta ya que jugaron parados de frente al arco rival, sin tanto toque para atrás y con más agresividad en ataque, el resultado final sumó una mancha más a la estadística muy negativa del torneo.

El único punto destacable de la tarde sureña fue el debut en la primera división de Paterson, quien viene teniendo buenas actuaciones en reserva y de la presencia en el banco de suplentes de las jóvenes promesas Machiga, Rocca y Bogado.

Si bien en varias oportunidades creímos y sostuvimos la idea de que este fue un torneo para el olvido, recapacitamos sobre la opinión y creemos que este es un torneo que el hincha y sobre todo los dirigentes que toman decisiones deben recordar para no volver a sufrir de este modo.

Porque no se puede volver a cometer errores en el armado, repitiendo puestos y dejando lugares sin jugadores preparados para ocupar sectores claves obligando a improvisar al DT.

Ya no se puede incorporar juveniles de clubes de primera que no solo no están a la altura de lo que el equipo necesita, sino que ni siquiera son tenidos en cuenta por el técnico por causas que no tienen explicación alguna.

En el fútbol hay un dicho y es el que dice que los chicos ganan partidos y los grandes campeonatos. Atlanta tiene jugadores ya asentados en primera y algunos jóvenes que vienen pidiendo pista. Ahora llega el momento de que con ingenio se contraten profesionales que puedan acompañar a los chicos potenciando su capacidad.

El bohemio deberá rápidamente tomar medidas con un manager que a esta altura parece estar perdido y contratar un técnico que decida antes de cualquier otra cosa, qué es lo que este equipo necesita. 

Si se vuelve a dejar las decisiones en manos de representantes, el equipo volverá a deambular por la zona baja de la tabla.